NANOTECNOLOGÍA
En los últimos años, el laboratorio del CTM se ha equipado con sofisticados equipos de microscopía (Microscopio Electrónico de Barrido (SEM) y Microscopio de Fuerza Atómica (AFM)) para posibilitar la investigación en nanorrecubrimientos que confieran a las superficies de piedra un valor añadido que las haga más competitivas en el mercado.
Los recubrimientos basados en nanotecnología que se están investigando desde el Departamento de I+D+i del CTM están basados en nanopartículas, nanoestructuras o nanocomposites. A continuación se describen algunos ejemplos de recubrimientos funcionales que emplean nanotecnología y que se están estudiando para su aplicación en superficies pétreas.
RECUBRIMIENTOS ANTIBACTERIAS
Desde el Departamento de I+D+i del CTM se está estudiando la aplicación de recubrimientos basados en nanopartículas de plata para dotar de capacidad antibacteriana y antifúngica a superficies de piedra natural, por la protección que garantizaría en lugares especialmente sensibles como hospitales, colegios, cocinas o baños.
RECUBRIMIENTOS SUPERHIDROFUGANTES (EFECTO DE LOTO)
Los avances de la nanotecnología permiten realizar recubrimientos superhidrofóbicos, que no sólo protegen a la piedra de la penetración de líquidos como el agua, sino que además vuelven a la superficie tratada autolimpiante. La superhidrofobia, también llamada “efecto de loto”, supondría un considerable ahorro económico y ecológico en tareas de limpieza y empleo de detergentes en superficies de piedra como fachadas de edificios, cuya exposición a la polución ambiental hace necesaria su limpieza periódica, puesto que la lluvia lavaría la suciedad presente en las fachadas.
RECUBRIMIENTOS FOTOCATALÍTICOS
Los recubrimientos basados en fotocatálisis tienen la capacidad de degradar sustancias contaminantes presentes en el aire por medio de reacciones de oxidación que se activan con la luz solar. Esta tecnología se está aplicando por medio de la adición de fotocatalizadores a todo tipo de materiales, como pavimentos y fachadas de edificios urbanos, de forma que se produce in situ la reacción de descomposición por fotocatálisis, mejorando la calidad del ambiente y disminuyendo los niveles de contaminación. Además, los sustratos tratados con ciertos fotocatalizadores, como el dióxido de titanio (TiO2), otorgan a las superficies tratadas la propiedad de la superhidrofilia, por lo que se convierten además en superficies autolimpiantes.
Desde el CTM se está investigando la incorporación de este tipo de recubrimientos en superficies de piedras calizas para la obtención de materiales de piedra natural capaces de eliminar la polución del aire a la vez que mantienen sus superficies limpias durante más tiempo.